Inspiración

Las Escuelas de Pintura deben su existencia al desarrollo de los oficios artísticos que, tanto en España como en Europa, tienen en su mayoría un origen que se remonta a la aparición de los gremios a finales de la Edad Media, coincidiendo con el inicio de la estructuración de las sociedades urbanas y de sus actividades.

La influencia de las organizaciones gremiales y su relación con los poderes civil y religioso fue determinante para el desenvolvimiento económico de las ciudades. Los talleres artesanales se agrupaban en calles y barrios, algunos de los cuales todavía hoy conservan su originaria denominación gremial (calle o acera de libreros, de la platería, de la joyería, etc.) y los conocimientos que aseguraban la pervivencia de su saber, eran conservados y transmitidos de modo directo en dichos talleres de generación en generación.

Todo ese legado documental de los gremios, en el ámbito de la creación gráfica, quedó plasmado en maravillosas ilustraciones, estampas y grabados, naipes, viñetas de aleluyas y miniaturas medievales y en los trabajos de impresores, editores y encuadernadores desde el Medioevo hasta el Renacimiento. Sus producciones artísticas suponen una de las partes mayores y más ricas de nuestro patrimonio cultural y que, al estar en sus orígenes, han dejado su señal en las esencias fundamentales de las enseñanzas artísticas hasta la actualidad.

A lo largo del siglo XVIII, este modelo entra en crisis por el pujante predominio del pensamiento liberal implícito en el reformismo ilustrado.

Con la llegada del XIX, en España se produce un verdadero auge de la Pintura de Historia como género específico, sobre todo el segundo y último tercio del siglo. Los grandes cuadros de historia eran muy demandados, y daban prestigio y fama al pintor. Hubo una verdadera superproducción de esta pintura donde se tocaron los más variados temas: clásicos; medievales; del Imperio; de la Guerra de la Independencia, este último muy cercano, casi contemporáneo de los pintores de Historia. Interesante, en cuanto a la historia del momento, son las pinturas de temas periodísticos, o crónicas o apuntes de hechos de armas, batallas, etcétera.

Recuperar ese espíritu artesanal y didáctico de la pintura como obra de arte, pero también como escuela de aprendizaje de nuestra Historia, es la primera inspiración y el último, gran objetivo de FFD.